Fue
un trabajo duro hasta llegar a lo que se llegó. La selección francesa terminó
el 2016 en el puesto 7 de la clasificación FIFA escalando 18 casillas tomando
en referencias el 2015. Al margen queda haber caído en la final de la Eurocopa,
lo esencial es la consolidación de muchos jóvenes que son el presente y el
futuro del combinado blue.
No
fue fácil. Didier Deschamps tuvo que lidiar con las bajas por sanción de Karim
Benzema (Real Madrid) y Mathieu Valbuena (Olympique Lyon), pero esto fue
beneficioso puesto que las puertas empezaron a abrirse para jugadores jóvenes que
le han dado al ex jugador de la Juventus muy buenos resultados. Recordemos que
lo primero era asegurar la portería y para esto se le dio la confianza a Steve
Mandanda (Crystal Palace) y Hugo Lloris (Tottenham). Deschamps sabe que la
experiencia es primordial en el arco francés. Después podemos decir que los
diferentes puestos del equipo se nutren de jugadores que militan en el
exterior.
Para
nadie es una sorpresa que Samuel Umtiti (Barcelona) fue la gran revelación de
la Eurocopa. El nacido en Yaundé supo suplir muy bien la ausencia de Raphael
Varane (Real Madrid). Después podemos mencionar a Eliaquim Mangala (Valencia),
un jugador que no pudo continuar su evolución en el Manchester City. Bacary
Sagna (Manchester City), no tiene demasiados minutos en su equipo y en eso sí
coincide con su rival en el puesto, el barcelonista Lucas Digne.
La
medular es propiedad de Paul Pogba (Manchester United), aunque N’Golo Kanté
(Chelsea) empieza a tener un protagonismo que se hace notar. Moussa Sissoko
(Tottenham) también es otro jugador que le da mucho despliegue al mediocampo
galo y es de los preferidos por el seleccionador francés. A finales del 2015 y
comienzos del 2016 Deschamps incluyó en la nómina blue a Kingsley Coman (Bayern
Munich) y Anthony Martial (Manchester United), dos jugadores que le dan
amplitud a la ofensiva francesa. Ambos son jóvenes y miembros de la sub 21. Hablando
del equipo dirigido por Pierre Mankowski no podemos dejar de mencionar a dos
atacantes que están siendo seguidos de cerca por los grandes del viejo
continente. Moussa Dembélé (Celtic) atraviesa su primera temporada en Escocia y
todo indica que será la última. Mientras que Ousmane Dembélé (Borussia
Dortmund) ha hecho una muy buena liga de campeones con el cuadro alemán. Ha sido hasta ahora una buena temporadapara estos dos jovenes, pero los titulares del equipo son Antoine Griezmann y Kevin Gameiro, la dupla goleadora del Atlético de Madrid.
Deschamps
ha sabido reconstruir y potenciar un equipo que ya ha dado muestras de su
calidad en el Mundial 2014 y en la última Euro. La evolución es admirable y
hace recordar lo que vivió este seleccionado en la Euro 96. Fuga de jugadores a
las mejores ligas europeas y Copa del Mundo de 1998 donde este grupo de
futbolistas demostraron su nivel logrando el primer título mundial para su
nación. Solo hemos mencionado a algunos nombres y faltan otros, sin embargo,
todo indica que el camino es el mismo de hace 20 años. Solo hay que saber si
Rusia 2018 consagrará por fin a esta gran generación de futbolistas franceses.
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