lunes, 21 de septiembre de 2009

River Plate, de príncipe a mendigo

¿Cómo explicar lo inexplicable? La idiosincrasia dicen algunos, aquella palabra difícil de recordar o difícil de entender ; y como lo inverosímil se acomoda al interés, este se adueña del momento, pero no se amista con el colectivo.

Causa hilaridad decirles “millonarios” apelativo designado a los de River Plate ; aquellos cuya franja roja adorna su pecho, que hoy desinflado sufre y come la derrota, la cual antes era culpa de su archirrival y hoy es responsabilidad de sus malos manejos.

“los fondos son ínfimos para fichar” rumor que se hizo realidad. Pero, ¿Cómo no hay dinero cuando se vendió tanto, y caro?

Recordemos, Ariel Ortega fue adquirido por el Valencia en mas de 10 millones de dólares, en aquellos tiempos cuando el ex jugador de la Sampdoria era considerado el sucesor de Maradona. ¿Han escuchado esto alguna vez?

Pero continuemos con la lluvia de millones. El recientemente retirado Juan Pablo Sorin fue comprado por la Juventus en 1996 y casi sin la mas mínima participación en la “vecchia Signora” fue campeón de Europa. No deseando menoscabar la carrera del ex jugador del Hamburgo, a quien la albiceleste hoy tanto necesita.

Nuestro bagaje en el conocimiento numérico es mínimo, por no decir nulo; pero me pregunto ¿Dónde están los dólares que se pago por Fernando Cavenaghi? Dinero ruso, muy apreciado en la actualidad. Y lo mismo diríamos en el caso de Lucho Gonzales, por coincidencia ambos jugadores hoy afincados en Francia.

Pablo Aimar también aterrizo en el Valencia con el cartel de estrella, lo mismo que Andrés D`Alessandro en el Wolfsburg, y seria una amnesia total olvidarnos del traspaso de Javier Saviola al Barcelona.

Dinero fresco que ingreso a la caja de los de Núñez, el cual ya se veía abundante con la venta de Maxi López al Barcelona, la de Fernando Beluschi al Olympiakos y la de Javier Mascherano a ese extraño grupo de empresarios del cual su nombre no recuerdo o prefiero no hacerlo.
Los goles también tenían su domicilio en el Monumental, tal es el caso de Julio Cruz. Se lo compro al Banfield y se lo vendió al Feyenoord. Lo mismo que el chileno Marcelo Salas, llegado desde la Universidad de Chile y colocado después en la Lazio. Y para regresar a nuestros tiempos como no mencionar a Gonzalo Higuain, miembro del selecto grupo que conforma el Real Madrid.

Con los nombres ya mencionados parece que la duda esta sembrada, pero esa no es la intención, por si así lo piensan. Pero como de números no se nada, es lógico dudar, porque hay muchos administradores como yo, pero cuyos errores no solo afectan a uno , sino a miles.

¡Descanse tranquilo señor Gorosito!

1 comentarios :

Marcos, siempre es placentero leerte y nutrirse de los manjares exquisitos que ofrece tu pluma y conocimientos. Te mando un gran saludo. Es una pena ya no tenerte de compañero, pero si se te ofrece cualquier cosa ya sabes mi correo. Estaré pendiente de tus próximas publicaciones.

Diego Eguiguren S.

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