Parafraseando la voz ajena, aquella con ecuanimidad y coherencia, pero la tarde hurta lo que la mañana otorga. No lo entiendo o no quiero hacerlo.
Anfield tenia la mosca sobre el oído, extraña frase, pero siempre quise usarla. Apeado de la Champions el Liverpool se refugiaba en la Premier, opción que aun ahora esta lejos.
Derrota tras derrota hacían tambalear la continuidad de un Rafa Benítez que con un pie afuera, al menos eso decían “los entendidos” , planeaba la recuperación apoyando a Lucas Leiva, confirmando a Javier Mascherano y fichando a Maxi Rodríguez (At Madrid).
Si hay algo que reprocharle al técnico hispano es su política o antipolitica al salir de compras.
Albert Riera no ha sido fundamental, prefiero al irregular Harry Kewell, actualmente en tierras otomanas. Se vendió a Steve Finnan para hacerle un lugar a Glen Johnson, ¿pero quien reemplaza al ex jugador del Chelsea cuando este se ausenta? Jamie Carragher el elegido, como sucedió el ultimo fin de semana . Clausuras la banda pero nulificas la ofensiva.
El griego Sotilios Kirgiakos apuntala una monolítica zaga que con Danny Agger , Carragher y el eslovaco Skrtel parece tener suficiente.
Emiliano Insua no es una lumbrera y si de brillo se trata Fabio Aurelio ve como nubes tormentosas opacan su cielo profesional.
Fernando Torres merece un post aparte, y el revulsivo Andrej Voronin alias el “cuervo” no cuajo lo esperado.
La recuperación elevo su mano y dijo presente y la ultima perla fue el clásico de la ciudad, derrumbando al Everton de David Moyes, equipo que promete pero se hace esperar.
La mañana tiene sus secretos porque inicia y termina, la tarde se los lleva pero la noche los devuelve. Entienden o no quieren hacerlo.
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