Anoche escuche a un poeta aquellos que ya no abundan y que se necesitan, porque si al momento de construir las palabras algunos están anudados, otros florecen, otros adornan.
Me he equivocado y estoy satisfecho , porque si algo dibuja una sonrisa es saberse errado y mejor todavía poder enmendar.
La motivación juega y de que manera. Muchos no la nombran pero todos la necesitan, y que mejor incentivo que jugar contra Alemania y requerir el triunfo.
Radomir Antic pobló el mediocampo extirpando al bueno pero lento Milijas, dándole frescura a la línea con el ingreso de Kuzmanovic (Stuttgart) acompañando a Stankovic (Inter), este ultimo ayudando al jugador del Dinamo Kiev Milos Ninkovic en las tareas de recuperación.
El infranqueable Ivanovic controlo muy bien al desafortunado Podolski, pero padeció en el segundo tiempo con Marco Marín (W.Bremen) porque este no buscaba el desborde sino el enganche hacia adentro.
Las galopadas de Kolarov le permitían a Jovanovic tener distancia con su marcador. Pero sin temor a equivocarme el jugador mas desequilibrante es Milos Krasic (CSKA Moscú) que dejo en claro la poca prestancia para la marca de Badstuer (Bayern Múnich) que abogando por el diremos que Podolski tampoco se recogió para ayudarlo.
Antic confía en el larguirucho Nikola Zigic , extraño no, el que menos optaría por un atacante rápido para aprovechar las espaldas de los centrales a sabiendas que los teutones iban a tomar la iniciativa del lance.
Hoy presenciamos a otro tipo de enganche , me refiero a Mezut Ozil (W. Bremen) - como creció este jugador con la partida de Diego a la Juventus – con manejo para sacudirse la marca y asistir. Sin el dribling de Messi pero un mejor conductor.
Muller (Bayern Múnich) por la derecha es un falso interior, prácticamente invade un espacio exclusivamente reservado para el vaivén de Phillipe Lahm (B.Munich) , lo malo es que los centros del marcador eran una perita en dulce para N.Vidic y N.Subotic (B.Dortmund).
Con mayúscula señalamos el desempeño Sammy Khedira (Stuttgart) nominalmente en la primera línea junto a Schweinsteiger (B.Munich) pero pisando el área rival constantemente.
El poeta escribía y la musa sonreía, dejando el pincel por la pluma y la pintura por la palabra; siendo la lejanía un estorbo, siendo tu recuerdo un beneficio.
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