Ya perdí la
cuenta de cuantos
llaneros cabalgan en
el viejo continente. La transición
ha sido extensa
y extraña. De cenicienta
a postulante mundialista. Todo se
basa en el
material humano. Todo se
basa en los
elementos que se
ganan la vida
en las principales
ligas del mundo.
El último en
llegar es un
goleador con pasaporte
español y que
en el apertura
venezolano marcó 14
goles en 12
partidos. Fernando
Aristeguieta ha sido
cedido al Nantes
por el Caracas, otorgándole el
club capitalino las
facultades al conjunto
francés de adquirirlo
por completo en
un futuro próximo.
Aristeguieta llega a
un equipo que
se mantiene en
el liderato de
la segunda división gala, y que tiene
en el Mónaco
a su principal outsider. El “colorado”
es un artillero
que sabe jugar
a un toque, decidido, y que
aprovecha su potencia
para romper la
defensa contraria llegando
desde atrás. Muy completo. Domina el
juego aéreo y
pese a su
aspecto de centrodelantero británico tiene
una excelente técnica
individual que le
permite construir combinaciones
letales.
Veinte abriles y
ya está en
Europa, ya sufrió una
lesión a la
rodilla, y ya tiene
una dura lucha
con Filip Djordjevic, goleador del
Nantes e internacional
serbio. Veinte años para
un seleccionado que
está separado de
la vinotinto, aunque quién
sabe, tal vez un
romance en las
canchas sellaría un
matrimonio que estaba
predestinado desde hace
mucho tiempo atrás.
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