El carácter no
se demuestra con
violencia. Patadas van y
patadas vienen. Pepe bien
sabe de esto
y no porque
le toca ser
una víctima. En el
medio o cerca de Casillas, aunque ahora
por delante de
López. Destruye más de
lo que construye, es
por eso que
su presencia en
la medular le
permitió al Mallorca
imponerse y cuando
volvió a lo
suyo le permitió
al Madrid definir
el choque.
Pepe perdió la
titularidad no por
bajo nivel sino
por la grata
explosión de Varane. No hay
verdad más certera
que esta. Siempre considerado
por Mourinho y
un fijo para
Paulo Bento, ni sus
acciones condenables lo
han extirpado de la
actividad. No es un
buen ejemplo, pero como defensor
hay que colocarlo
entre los expeditivos.
A cara de perro, barriéndose o
entrando con rudeza. El portugués no rehúsa al contacto,
es más, cualquiera diría
que le encanta. Internacional indiscutible, blanco de
los referís y
un punto fijo
para los aficionados. No hay exquisiteces
en
él, la estética la
deja para otros. A él
le enseñaron a
defender y lo
hace como debe
ser, con fuerza y
sin amedrentamientos.
Pepe no será
una estrella en
el Madrid pero
cumple su cometido. No es
un Cristiano o
un lio, es como
es, y creo que
dentro de algunos
años cuando la
actividad lo abandone
se recordará al
luso de raíces brasileñas
que pegaba, pero principalmente defendía.
0 comentarios :
Publicar un comentario