La noticia se adelantó
a mis intenciones. Un regreso
a primera demanda una
inversión cuantiosa e
inteligente. El Villarreal lo
sabe, y se cobija
en las antiquísimas frases
que suenan trilladas
pero que son veraces. Un buen
equipo se construye
de atrás para
adelante y que
mejor hacerlo con
la nueva joya
del balompié serbio, Aleksandar Pantic.
Lateral o central.
No es
un Mihajlovic, pero su
polivalencia puede matar
dos pájaros de
un tiro, y cuando
el dinero es
limitado esta es una ventaja. Internacional sub – 21 y
en la mira
de la mayor. Llega gratuitamente
y desde ya este
es un gran
negocio.
Solo 13 encuentros
con el mítico
Estrella Roja y
21 años encima. Pantic tiene el comodín
de un apellido
que ya hizo
historia en la
liga, aunque las filigranas
están lejos de
este bravo defensor
que antepone la
seguridad a la fantasía.
Apellido con trayectoria
y muy recordado
en Madrid. Apunta alto, pero
estas apreciaciones ya
son conocidas tras
un fichaje anónimo. Pantic es
la plataforma que
el Villarreal necesita, primero para
quedarse en la
división de honor
y después para
tentar un cupo
en las copas europeas.
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