La llegada de un defensor se caía de maduro en el Chelsea. Antonio Conte pensaba como primera opción en Leonardo Bonucci (Juventus), un jugador que conoce muy bien, sin embargo, su alto costo hizo imposible esta operación. Finalmente el técnico italiano ha conseguido la pieza defensiva que buscaba y esta es el alemán Antonio Rudiger, jugador de magnifica participación en la Copa Confederaciones y que ya demostró en la Roma su capacidad y solvencia.
No solo Bonucci se le ha escapado al Chelsea también no se pudo concretar el fichaje del griego Kostas Manolas, pero era claro que había que pescar en el mercado italiano y la Copa Confederaciones fue el detonante que llevo a Rudiger a ser considerado por el cuadro londinense. El precio de la transacción le costaría al Chelsea 33 millones de euros, con un sueldo para el jugador de 4,5 millones por temporada. Es decir, pese al gran nivel mostrado por David Luiz, Cesar Azpilicueta, y Gary Cahill, el técnico Blue sabía que para afrontar la Champions League tenía que reforzar esta línea, sin olvidarnos que ya se está finiquitando la adquisición del francés Tiemoeu Bakayoko (Mónaco) para repotenciar la medular.
Antonio Rudiger ha sido internacional alemán en 16 oportunidades y todo hace indicar que es el principal candidato a ocupar la plaza de Jerome Boateng. Durante su estancia en la Roma se ha destacado como uno de los mejores defensores de la Serie A y sus actuaciones lo han llevado a convertirse en uno de los mejores defensores del viejo continente.
Con Rudiger en la defensa, Bakayoko en el mediocampo, y supuestamente Lukaku en la ofensiva, el Chelsea se prepara para intentar ganar la Champions League y revalidar el título en la Premier, doblete muy complicado y que en su momento fue la guillotina de Jose Mourinho. Falta saber si Antonio Conte logrará mantener el nivel de un conjunto que juega de memoria, pero que carece de otras variantes que le den la posibilidad de cambiar el rumbo de un partido desde el banquillo.
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