No es un fiasco, aunque tampoco es un acierto. Comprar relativamente
barato es bueno cuando la etapa de construcción se impone, sin embargo, las
adquisiciones tienen que ver con las condiciones y la actualidad del artículo. Fernando
Torres es presa del miedo, malestar incurable cuando no se tiene voluntad para
salir adelante.
Paciencia, pide el “pippo” Inzaghi, pero como tener
paciencia con un delantero de este calibre que solo ha anotado una vez en 10
partidos. Como poder asolapar su verdadero presente cuando Mourinho lo colocó
como último delantero en la plantilla del Chelsea. En otras palabras, estamos
ante un atacante, venido a menos, que pensó que el Milan era la posibilidad de
reflotar una carrera que al parecer se terminó en los tiempos en Anfield.
No aseguramos que el ariete español se ha olvidado de
jugar, sino que ha perdido la confianza, y eso no se puede conseguir en una
tienda por departamentos. El aspecto es mental, la peor de las enfermedades. Casi
como lo que le sucedía a Federer contra Nadal. Te acostumbras a la derrota y
cada vez que intentas afrontarlo tus temores te impiden alcanzar el triunfo. Que
terror, porque el miedo es un escollo que corroe la mente y te convierte en un
miserable invalido.
Se lo ve pesado, como sin ganas. Muerto en vida, y su
performance en el campo es la de un veterano que más piensa en el retiro y no
en inflar las redes rivales. No quiero ser contundente y decir que la carrera
de Fernando Torres ha finalizado, pero lo que él requiere es un trabajo
psicológico profundo. Es decir, familia, entorno, crecimiento, y motivaciones. Pero
principalmente, lo que debe existir para una posible recuperación es la
voluntad suficiente que debe tener el español para salir adelante.
Es un problema grande que no tiene que ver con goles. Es un
problema grande que nada tiene que ver con fútbol. No importa si Fernando
Torres anota o no, ahora hay que verlo desde el punto de vista humano, porque
con cada crítica y cada minuto que pasa el mayor perjudicado es el famoso y
menguado delantero hispano.
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