El anonimato se presenta y se ausenta, no imponiéndose ni tampoco
declinando, porque en un mar de dudas hay un océano de precauciones. La popularidad tarda muchas veces, pero quizá el perfil bajo sea la
llave; buscando esa puerta grande llamada mundial o esa puerta chica llamada
“por poco”.
Bosnia se vio imposibilitado de la calificación mundialista por la
favorita España, ojo, favorito no se asemeja al mejor. Y este ultimo miércoles
por Portugal. Miroslav Blazevic, el conductor de la Croacia de Suker, Boban y
compañía, ve como la historia no juega a su favor, aunque tiende sobre la mesa
los ingredientes necesarios para volver a la orbita de los mas grandes.
Deliciosa generación la de Bosnia, con un Zvjezdan Misimovic como
estandarte. Un enganche moderno, con llegada, con gol. Alemania es el hogar donde conoció de todo; la frustración en el Bayern
Múnich y la consagración con el Wolfsburg. Zlatan Bajramovic del Eintrach Frankfurt; un autentico conocedor de la
Bundesliga. Militó en el Friburgo, también estuvo ligado al Schalke 04.
Lo suyo pasa por la recuperación. Siempre instalado en la primera línea
de volantes, lugar donde perdió la pulseada con Rahimic. El volante del CSKA Moscú, de apariencia avejentada, ofrece un
despliegue y esencialmente una ubicación destacable. Rahimic le dice adiós al ambiente internacional. Consiguió la Copa UEFA
el 2005 con el conjunto moscovita.
El jefe de la última línea es Daniel Jahic. Demuestra su nivel en el
Montpellier. Stopper izquierdo o segundo central; en la selección sufre por la
ausencia de un carrilero zurdo, porque Salihovic no lo es. Salihovic es el eje del Hoffenheim. Su popularidad ha ido en alza de la
mano con la de la escuadra azul. Magnifica pegada, su posición natural es en la primera línea de
volantes, con llegada a las puertas del área rival.
Blazevic no ha girado su vista hacia Escocia, para observar al
experimentado Sasa Papac. Miembro de la anterior generación, no es un lateral ofensivo pero conoce
mejor la franja que Salihovic. Defiende al Glasgow Rangers. Y si pensamos en Papac, como no hacerlo en Hassan Salihamidzic. Con ida
y vuelta, el ex jugador del Hamburgo aun conserva su velocidad y desborde. Campeón de Europa con el Bayern Múnich, llevo el estandarte de la
selección conjuntamente con Elvir Bolic, el eterno goleador del Rayo Vallecano.
Actualmente juega en la Juventus.
Bosnia cuenta con dos tanques en el ataque. Edin Dzeko y su monolítica
figura enquistado entre los centrales rivales. Juego aéreo y olfato goleador. Actual campeón alemán con el Wolfsburg. Vedad Ibisevic es la pareja de Dzeko, aunque algunos señalan que ambos
se estorban. Potente, oportunista y gran definidor, su presencia obliga a Dzeko a ir
por fuera dándole la contra a su naturaleza. Lo que la vida niega el
destino otorga y lo que el destino otorga, las circunstancias se oponen, porque
si de incongruencias se escribe, a los autores se niega
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