Digerida la derrota contra Venezuela. Los albicelestes buscan ese rumbo que al parecer lo extravío en un lejano 1994, con las contras de Dumitrescu y Raducioiu, y los milimétricos servicios de Hagi.
Los 3 al fondo de las primeras fechas era un esquema al estilo Alejandro Sabella, tal como llevó a la gloria al Estudiantes. Pero como ya hemos mencionado, los automatismos se consiguen con un trabajo continuo, y los seleccionados no tienen esta posibilidad.
Argentina carece de laterales, nada hace pensar que tiene carrileros. Pablo Zabaleta (Manchester City) no tiene competidor por la derecha. A la izquierda, se ha optado por Clemente Rodríguez – a quien Sabella extrañó en las fechas anteriores - debido a la lesión de Marcos Rojo (Spartak Moscú).
El parsimonioso despliegue de Martín Demichelis (Málaga) y el “italiano” Nicolás Burdisso completan la nueva línea defensiva. Imaginó que la presencia de Fernando Gago (Roma) es para darle un respiro a Javier Mascherano (Barcelona), y una salida más limpia al esférico.
Apeado Sergio Agüero (Manchester City) por problemas en el aductor. La primera idea es reemplazarlo con Javier Pastore, en una función creativa por dentro, asociándose con Riki Álvarez, quien también estaría sobre la izquierda. Con esto se supone, que tanto Messi e Higuain (Real Madrid), estarán exentos de recogerse a buscar el balón.
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