Acaba de perder
la selección nacional
y nuevamente estamos
eliminados del Mundial, eso
no es novedad. Alemania sigue
con su racha incontenible
y pese a
los esfuerzos de
Ibrahimovic todo indica
que los teutones
estarán presentes en
tierras cariocas. Es día
de eliminatorias y
pienso, o mejor dicho, creo que
no están de
humor de leerme, pero
como soy testarudo
disculpen el atrevimiento.
Ese famoso kick
and rush ha
quedado en el
olvido. Ya ni siquiera
Escocia lo practica, y eso que
los ahora dirigidos
por Gordon Strachan
no tienen muchos
argumentos cuando la
pelota se mueve
a ras del
piso. Bueno, para que extenderme
con palabrerías, es mejor
mencionar al protagonista
de estas poco
armoniosas líneas. Noruega nunca ha
sido una potencia
del balompié. Ni siquiera
podríamos catalogarla como
la sensación en
algún momento, pero como
todos en esta
vida llego a
tener su minuto
de fama, y como
para no olvidarlo, su
sparring elegido fue
el Brasil de
Ronaldo y compañía. Ya todos
se habrán dado cuenta que
hablo del Mundial
98, poco recordado dicho
sea de paso, pero el
escenario perfecto para
que esa humilde
nación gélida diera
el batacazo al ganarle a
Brasil y después caer ante
la Italia de
Cesare Maldini.
Todos, me corrijo,
casi todos esos
vikingos jugaban en
la Premier League. Desde un
Frode Grodas (Chelsea) hasta
un Ronny Johnsen (Manchester Utd). Pero no
piensen que solamente
eran ellos, no podemos
dejar de mencionar
a la dinastía
Flo, es decir, Havard,
Jostein y Tore
André. Allí nomás se
cuela el incisivo
Oyvind Leonhardsen
(Liverpool) y un
lateral de rostro
siniestro pero que
gustaba rematar desde
fuera del área, nos referimos a
Stig Inge Bjornebye, que también
militaba en el
club de Anfield.
Sin duda me
he extendido, pero como la justicia
me obliga debo
abandonar el ordenador
nombrando al pequeño
Erik Mykland (Panathinaikos),
y al
termómetro del equipo, el
gigante de los
botines amarillos Kjetil
Rekdal (Hertha Berlín). Nada por
aquí nada por
allá, sé que están frustrados, pero contra
eso y contra
todo, el tiempo es
la mejor medicina. Hasta luego.
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