Cuando una
estrella se va
otra tiene que
llegar. Esa es la
premisa que reina
en el fútbol,
y para ello hay que gastar muchas
veces más de
lo pensado. Christian Benteke
cuesta 30 millones
de euros lo
cual es bastante
para el Atlético
de Madrid, aunque pensándolo bien, si
el belga hace
un gran mundial
puede valer el
doble de esa
cifra.
Primero fue
Fernando Torres, después el “Kun” Agüero
y Diego Forlán. El
colchonero sabe fichar
goleadores y tras
la partida de
Radamel Falcao al
Monaco sigue en
busca del atacante
que pueda retomar
la estela dejada
por el ariete
colombiano. No estamos diciendo
que David Villa
ha hecho un mal trabajo, tampoco que Diego
Costa ha pasado
desapercibido, pero lo cierto
es que la
salida del hispano – brasileño está
cada vez más
cerca y tanto
Enrique Cerezo como
el “Cholo” Simeone
saben que la
opción Benteke es
la ideal para
un conjunto que
hoy se tutea
nuevamente con los
grandes.
El asunto
pasa por el
dinero. Más de 30
millones de euros, por
ahora, es una aberración para
la economía rojiblanca, sin embargo, la
posibilidad de la
salida de Diego
Costa hacen sonar
las alarmas sobre
todo cuando el
final de temporada
se debate entre
la liga y
la Champions.
Benteke es
una de las
grandes figuras de
la Premier. Sus 19
goles en el
ejercicio anterior jugando
para el Aston
Villa y la
clasificación belga al
mundial hacen de
este delantero uno de
los más deseados
del ámbito internacional, por lo
que el Atlético
tendrá que competir
por su ficha y por
ende apresurarse si es que
anhela tener otra
dupla de ensueño
que pueda golear
en Europa y
en la madre
patria.
Las cifras
están claras y
todo indica que
las negociaciones serán
extensas. Nadie duda de
la calidad de
Benteke, pero los requerimientos del
Aston Villa no
concuerdan con las
posibilidades del conjunto
madrileño. Dinero y más
dinero, de eso se
habla y de
eso se come. La pregunta
es, ¿Podrá la clase
media comprar lo
mismo que clase
alta?
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